ACTITUD DE SERVICIO AL PACIENTE

La  actitud es el  determinante en una persona y  es más difícil modificar la actitud que los conocimientos o habilidades Y es la actitud  lo que le permitirá al profesional de la enfermería empatizar con el paciente.

En ocasiones el primer contacto del paciente con los servicios de salud será a través de los profesionales de enfermería. De él puede depender que el paciente adopte de entrada, una posición de mayor apertura y colaboración. Procure evitar prejuicios culturales, actitudes moralizantes o de pesimismo que le lleven a malos entendidos en la relación enfermero-paciente. Es  preferible mostrar una actitud receptiva y flexible, con presencia de límites y manteniendo los roles, intentando responder a las preguntas de modo que le resulte comprensible y ofreciendo explicaciones de manera precisa, en la medida de lo posible. Y así aminorar los posibles miedos, dudas y recelos creados en este sentido, por parte del paciente, favorecerá la confianza hacia el profesional y posibilitará la obtención de mayor información sobre el problema